Donald Trump debería estar preparando ya su mudanza. Si nada se tuerce, en enero se convertirá en el inquilino número 45 de la Casa Blanca. Sin embargo, aunque suene a broma, Donald Trump podría considerar que instalarse en la residencia presidencial es un marrón: el magnate inmobiliario y presidente electo posee algunas de las propiedades más lujosas y espectaculares de EEUU.
Por lo pronto, su mujer Melania Trump ya ha hecho pública su intención de quedarse en su «confortable» hogar y ahorrarse el proceso de meter todos sus bienes en cajas y darles un espacio en la casa presidencial.
Estas son sus residencias habituales
Mansión Mar-a- Lago (Palm Beach) – Valor: 200 millones de euros
Apartamento en la Trump Tower (Nueva York) – Valor: 100 millones de euros
Finca y bodega Kluge (Charlottesville) – Valor: 80 millones de euros
Casa de campo Seven Springs (Bedford) – Valor: 30 millones de euros
Ático en Manhattan (Nueva York) – Valor: 20 millones de euros
Fuente Idealista.com