Vintage (cosecha) es un término que proviene del inglés, derivado del francés vendange luego de alteración semántica, gráfica y de pronunciación. Designa un vino destacable por su calidad, en referencia a una cosecha o añada.
Su uso se ha extendido en los últimos años para referirse a objetos o accesorios con cierta ‘edad’, que no pueden aún catalogarse como antigüedades pero que, como los buenos vinos, se considera que han mejorado o se han revalorizado con el paso del tiempo.
También se viene usando el término vintage como un estilo, que revive modas pasadas, no solo en la ropa sino también en decoración y la arquitectura.
El concepto se extendió y persiste en los ambientes en donde se busca recobrar el espíritu del pasado, revivir las formas que en un instante se creyeron perdidas pero que en una simple maniobra vuelven a tomar su color y brillo original.
Así, los muebles y los objetos de decoración fundamentalmente de las décadas de los 50, 60 y 70, están teniendo una segunda oportunidad, los originales, o sirviendo de inspiración para la creación de copias, con una clara inspiración retro, imitando o evocando el gusto o la moda de un tiempo pasado.
Pero el problema con todo lo que se pone de moda es el precio, incluso si compramos los muebles de segunda mano, a menos que estén muy deteriorados y los tengamos que restaurar, lo cual es también otra opción